Decisión tomada mientras cenas silenciosamente con tu familia después de haber estado de cuatro a nueve con tu amado ordenador en páginas tan ricas en conocimiento e información como Twitter, Cuanto Cabrón, y muchas más que no van a ser mencionadas para evitar un frustrado intento de publicidad.
Ya sabéis, ese momento en el que decimos: "Mañana... Vamos, es que va a ser: llegar del insti, comer, sacar el libro y estudiarme tó." No te lo crees ni tú, campeón, dijo cualquier persona que observara la situación. Puede ser que la alineación de los planetas ayudara, pero el caso, es que se cumple el cometido y absolutamente toda la lección queda estudiada y preparada para el fatídico examen que se avecina.
En el "nefasto día" mencionado al primer día, recibes la nota de tu examen iluminado, contento, espabilao, alegre... Y sacas un 4. Tu primera reacción es quedarte con cara del niño empollón del anuncio de las Danet. La segunda es levantarte enérgicamente hacia la mesa del profesor/a y relatarle tu vida o en su defecto, lo relatado en el párrafo anterior.
El maestro justifica tu calificación con unos argumentos un tanto endebles para ti y ese mismo día vuelves a casa más bien abatido e impotente. Y lo único a lo que puedes echar la culpa de tan baja nota es tu profesor.
Exacto. El profesor. De no ser por ese activo el sujeto de la anterior situación hubiera sacado 5 puntos más. Porque se había preparado el examen. De no ser así, se merece el cuatro y menos aún.
El caso es que yo, también estudiante (buen estudiante, por cierto), también tengo profesores así. Dos. De Biología, mujer; y de Informática, hombre.
¿Y qué pasa con ello? Pues que yo, y seguro que los compañeros de mi clase están de acuerdo conmigo, he sufrido injustas calificaciones a lo largo del curso, y esas notas son de lo poco que ha mancillado este curso.
Ellos funcionan así: primero se da la situación de que me preparo concienzudamente, hago el examen y saco muy mala nota o que no sea suficiente para mí. Quiero aclarar que estudio de verdad para esos exámenes, porque si no, no tendría derecho a denunciar lo que me dispongo a contar a continuación.
La de Biología, en primer lugar, tiene ocurrencias tales que esta en clase:
"Dicta" los apuntes a una velocidad de 700 palabras por minuto. Por ejemplo:
"El parasitismo es un tipo de simbiosis sensu lato, una estrecha relación en la cual uno de los participantes, (el parásito) depende del otro(el hospedero u hospedador) y obtiene algún beneficio, lo cual no necesariamente implica daño para el hospedero. El parasitismo puede ser considerado un caso particular de depredación. Los parásitos que viven dentro del huésped u organismo hospedador se llaman endoparásitos y aquéllos que viven fuera, reciben el nombre de ectoparásitos. Un parásito que mata al organismo donde se hospeda es llamado parasitoide. Algunos parásitos son parásitos sociales, obteniendo ventaja de interacciones con miembros de una especie social, como son los áfidos, las hormigas o las termitas."El alumno, desconcertado, pregunta:
"Ehhhh...¿profe, puedes repetirlo?"
A partir de ahí pueden darse dos situaciones. Una: que te ignore compleeeeetamente. Dos: que te responda que no.
Otra estrafalaria actuación de esta mujer es que, a pesar de que tú le expliques detalladamente por ejemplo una definición en un examen, ella siempre te va a decir: "¿Pero por qué? ¡Me tienes que explicar por qué!" Mis compañer@s de clase y yo bromeamos con la situación: "¿2+2?" "4" "¿Pero por qué? ¡Me tienes que explicar por qué!"
El profesor de Informática directamente te evalúa con 4 puntos menos de los que te mereces y cuando vas a protestarlo, te dice: "¡No, es que no me venga usted ahora con esas, porque se ha pasado usted todo el curso jugando en Internet...!" Etcétera, etcétera... Cuando resulta que son otros compañeros los que se han pasado el curso jugando y reciben mayor nota que los que no.
Quiero acabar con que con estos profesores se destruyen las motivaciones que tiene uno con una asignatura. A mí, con intención de estudiar Ingeniería Informática, me ha tocado un poco el caso de ese profesor. Y que también dichos profesores que echan su "discursito" a los que han suspendido cuando la culpa es suya, son en parte responsables del fracaso escolar de algunos alumnos.
Gracias por vuestra atención.
